Por qué no disfruté tanto cuando volví a ver ‘Friends’

Hace unas semanas, cuando publiqué la minicrítica de Please like me, comentaba que esa serie había superado en mi escala personal a Friends. Y es que, tras un reciente re-visionado en la plataforma esa de la que ya hablé en su momento, he descubierto que la mítica serie de los seis amigos de Manhattan no ha envejecido del todo bien. Me explico:

Friends sigue pareciéndome una serie estupenda. Sus situaciones son hilarantes, sus diálogos magníficos, sus personajes son a cuál más acertado y, sobre todo, y donde yo creo que reside el secreto de la serie, sus actores son una maravilla. Todos y cada uno de los seis. Son geniales y lo bordan desde el capítulo 1.

Los actores de Friends Javier Miró

Entonces, ¿qué pasa? ¿Por qué leches digo que no disfruté tanto cuando volví a verla? ¿Me quiero hacer el interesante? Sí a lo último, por supuesto, pero hay matices para lo demás. Creo que el guion (qué raro se me hace escribir esta palabra sin tilde, dios) es demasiado 90’s o, si lo prefieren, muy poco del siglo XXI.

Sigo explicándome. En este nuevo visionado, me he encontrado con bastantes situaciones y, sobre todo, chistes bastante desafortunados. Ya sé que la serie es gamberra y su único fin es hacer reír, pero hay cosas que con el paso de los años huelen un pelín.

¿Un ejemplo? La ex-mujer de Ross, la que le deja por otra mujer en el primer capítulo. Su única función en Friends es ser lesbiana. Todo lo que quede más allá de su condición sexual es irrelevante. ¿Otro ejemplo? El padre de Chandler es transgénero. Esto es motivo de vergüenza y mofa constante. Por supuesto, este personaje solo aparece como un pervertido cuya errónea sexualidad e identidad de género son lo único que importa. ¿Más? La serie tiene menos variedad racial que la junta directiva del Ku Klux Klan (Mónica y Ross son judíos, pero eso no parece entorpecer la tonalidad monocroma de las pieles, que es de lo que se trata). El único personaje que se sale un poco de esta tónica es Joey, de ascendencia italiana. Sí, el mismo tipo que no tiene un trabajo fijo, solo piensa en sexo y en comer, y es cortito (por ser buenos y no usar otra palabra más fuerte). Vamos, que si Friends fuera una serie española, Joey sería Pepe y habría nacido en Cádiz. Todo muy LOL.

Más Friends Javier Miró

Y esto por no hablar de los férreos roles de género de los personajes y la fuerte tendencia al machismo. Es gracioso que Joey lleve bolso, es preocupante que el hijo de Ross quiera jugar con muñecas, es divertido que todo el mundo se piense que Chandler es gay, es hilarante que Mónica gane a los chicos a los deportes, es gracioso que Phoebe sea abierta sexualmente, y es normal que Rachel sea adicta a las compras. Con esto cito solo unos ejemplos, pero a poco que se escarba mínimamente en internet, hay para aburrir.

En fin, supongo que algunos de los que estéis leyendo esto me consideraréis un mojigato, me acusaréis de esclavo de lo políticamente correcto, o incluso diréis que defiendo la censura. Nada más lejos de la realidad. No pido que eliminen la serie, ni que quemen todos sus DVDs, ni que aquellos que sí sigan disfrutándola sean tildados de descerebrados. No van las cosas por ahí.

No pido censura; jamás haría algo parecido. Simplemente explico por qué ya no me hace tanta gracia Friends, por qué ya no me siento cómodo riéndome con chistes a costa de colectivos que sé que lo están pasando mal. Gente que se siente o ha sentido desplazada por la mayoría de “gente normal” y que, incluso hoy en día, es perseguida, encarcelada y asesinada en un buen puñado de países.

Llamadme lo que queráis, pero los males de los demás no me hacen gracia. Por ello, de nuevo me reafirmo: no pido censura, pido responsabilidad, empatía y justicia social. Pido una mentalidad acorde con el mundo avanzado en el que se supone que vivimos. Y una vez que hayamos alcanzado una sociedad justa y todos seamos realmente iguales, ya estaremos en posición de reírnos de nosotros mismos y de los demás. Claro que sí.

4 comentarios sobre “Por qué no disfruté tanto cuando volví a ver ‘Friends’

Agrega el tuyo

  1. Yo la estoy viendo ahora por primera vez y coincido plenamente contigo. Hay circunstancias que entiendo que hace unos años hicieran gracia, pero que si se publicasen hoy nos llevaríamos las manos a la cabeza.

    También hay que entender que toda creación hay que mirarla con los ojos y moral de la época. Cuando nos vean a nosotros en unos años, también se echarán las manos a la cabeza.

    Un saludo.

    1. Buenas, Carmelo. Yo lo veo como tú, pero me parece que Friends no es tan vieja (se dejó de emitir en 2004). Han pasado solo 13 años. Además, es muy mainstream. No sé, me choca un poco.
      También me ocurre que defiendo que los escritores busquen hacer sus obras perdurables en el tiempo. En el caso del humor, veo muy fácil apostar toda la gracia a chistes de actualidad. El reto es buscar sacarle la sonrisa al espectador/lector en cualquier momento.
      Bueno, me estoy pasando de exigente 😀

  2. Es verdad lo que dices. Pero hay que entender que la serie se creo en los 90, en donde todas las situaciones que mencionas eran de la vida cotidiana. Todos los chistes o burlas eran de lo mas normal en esa época.
    Podemos decir también que la serie evoluciono con el tiempo. No puedo darte ejemplos. Pero hay chistes o burlas que, con el correr de las temporadas, fueron reduciendo su frecuencia, ojo, solo se redujeron las menciones, porque en definitiva, la mayoria de estos chistes eran basados en los estereotipos que forjaron a los personajes.
    De todas maneras, y aqui es donde voy a ser criticado, la serie me encanta. La apoyo 100%, puede ser que tenga todas estas cuestiones que no se acoplen a las epocas “open mind” en las que vivimos, pero desde mi punto de vista, e insisto, desde mi punto de vista, los chistes, burlas y todo lo demas, son exelentes, y me voy a seguir divirtiendo como lo hice desde el primer momento.Aclaro que vi la serie por lo menos 5 veces, y estimo la repetire varias mas.
    Como comentaron arriba, la serie se creo en los 90 y hay que entender que toda creación hay que mirarla con los ojos y moral de la época. Quien no pueda hacerlo o le molesten todas esas cuestiones, no deberia mirar la serie.

    1. Tal y como digo en la entrada, no trato de juzgar la serie ni a sus fans (yo me incluyo entre ellos, pese a todo lo expuesto), simplemente explico los motivos por los que no disfruté tanto cuando volví a verla.
      Un saludo, y gracias por comentar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Responsable: Javier Miró Gómez

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Orgullosamente ofrecido por WordPress | Tema: Baskerville 2 por Anders Noren. | Política de privacidad

Subir ↑